"DE QUE SE PROFUNDICE EL PROCESO TRANSFORMADOR O SUCEDA LO CONTRARIO DEPENDE QUE HAYA MAS O MENOS HAMBRE, MAS O MENOS LIBERTAD PARA SEGUIR LUCHANDO, MAS O MENOS POSIBILIDADES DE SEGUIR CONSTRUYENDO UNA VIDA MEJOR PARA NUESTROS HIJOS."

HUGO YASKY-SECRETARIO GENERAL
CENTRAL DE LOS TRABAJADORES DE LA ARGENTINA



NOTICIAS EN LA CENTRAL


lunes, 2 de marzo de 2015

ENTREVISTA DEL OCAL/UNAJ A IGNACIO CONCETTI, "FORMACIÓN Y ECONOMÍA SOLIDARIA, UN HORIZONTE POSIBLE"



Entrevista realizada por el Observatorio de Calificaciones Laborales de la Universidad Nacional Arturo Jauretche al Secretario General de la CTA Florencio Varela, Cro. Ignacio Concetti. Boletín Nº 5/Febrero 2015

FORMACIÓN Y ECONOMÍA SOLIDARIA,
UN HORIZONTE POSIBLE

Dialogamos con el representante de la Central de Trabajadores de Argentina en busca de su perspectiva sobre la formación profesional en la región. Concetti compartió con el OCAL las prioridades en relación al tema y la estrategia de trabajo que despliega la CTA en el distrito

Entrevista a Ignacio Concetti.
Secretario general de la CTA de Florencio Varela.

Buena parte de quienes se forman en los cursos de la CTA buscan inmediatez en el impacto de la capacitación. “La familia no puede esperar –dice Concetti—. Nosotros tenemos mayor cantidad de inscriptos en los cursos de electricidad del automóvil y de electricista instalador, que son de salida inmediata y que además acreditan para ingresar a una pequeña empresa o trabajar contratado”.

Ante el panorama del distrito y atendiendo a las grandes transformaciones en el mundo de la producción y del trabajo, las preocupaciones de este sector sindical se traducen en
el interrogante que formula Concetti:
“¿Cómo hacemos para que los trabajadores tengan la posibilidad de conservar el empleo sin ser víctimas de los ajustes y reajustes de las grandes empresas, que tienen sus casas matrices en el centro del mundo y la periferia funciona como un lugar donde se nutren de mano de obra que en algún momento será descartable?”.

La reflexión se profundiza señalando el papel de los demás protagonistas Indagar sobre cómo percibe la CTA la problemática de la formación para el trabajo en Florencio Varela fue el disparador del encuentro con Ignacio Concetti. Su primera reflexión hizo foco en la relación entre demanda de calificaciones y perfil de los trabajadores en busca de empleo. “Mientrasel mercado laboral apunta a trabajadores con un piso de conocimientos
básicos, hay una importante franja que no ha transitado por espacios de formación que los califique para la demanda actual de la economía mundial”, señaló.

Quienes se acercan al centro de formación profesional de la central en busca de calificaciones, pueden, mayoritariamente, agruparse en dos grandes franjas: entre 35 y 50 años y entre 16 y 25 años. “Son los dos extremos de la población económicamente
activa de la zona que no tiene un empleo estable, que depende de la capacitación
y la formación para ir viendo diferentes alternativas”, aclara el dirigente gremial. Tanto los jóvenes como aquellos trabajadores “que en algún momento de su historia han perdido
la posibilidad de tener continuidad en un empleo estable”, son los sectores con más desventajas en términos de calificaciones profesionales.

“Pensamos en términos de la realidad laboral de
nuestros propios compañeros, para que tengan la oportunidad
de avanzar sobre otro piso”.

Buena parte de quienes se forman en los cursos de la CTA buscan inmediatez en el impacto de la capacitación. “La familia no puede esperar –dice Concetti—. Nosotros tenemos mayor cantidad de inscriptos en los cursos de electricidad del automóvil y de electricista instalador, que son de salida inmediata y que además acreditan para ingresar a una pequeña empresa o trabajar contratado”. Ante el panorama del distrito y atendiendo a las grandes transformaciones en el mundo de la producción y del trabajo, las preocupaciones de este sector sindical se traducen en el interrogante que formula Concetti: “¿Cómo hacemos para que los trabajadores tengan la posibilidad de conservar el empleo sin ser víctimas de los ajustes y reajustes de las grandes empresas, que tienen sus casas matrices en el centro del mundo y la periferia funciona como un lugar donde se nutren de mano de obra que en algún momento será descartable?”. La reflexión se profundiza señalando el papel de los demás protagonistas de esta trama: “Creemos que es importante tener ahí una mirada muy rigurosa. En primer lugar porque la responsabilidad empresarial es una de las condiciones básicas para pensar las condiciones de empleabilidad, pero más allá de que los empresarios cumplan o no con esa responsabilidad, es cierto que hay un gran sector de trabajadores rezagados que aún no ha podido disfrutar de los beneficios del modelo”, opina el dirigente.

Al mismo tiempo, el secretario general agrega que si bien se ha reducido drásticamente la pobreza y el desempleo, la responsabilidad que les cabe como organización es “discutir con propuestas sobre aquello en lo que tenemos seguir avanzando en este modelo productivo de carácter nacional y popular, en lo que estimula e incluye al conjunto de la población. Nosotros nacimos como central en el marco de esa reivindicación: patria justa, libre y soberana, distribución de la riqueza, soberanía económica… Nosotros bancamos el proyecto del gobierno nacional en este sentido”.

Como central obrera, la CTA reconoce una identidad que desborda lo estrictamente sindical, para atender una diversidad de luchas reivindicativas. “Nosotros no somos sólo reclamadores de salario y de mejoras en las condiciones laborales. Discutimos cada cosa en su lugar: en el marco de las paritarias las cuestiones salariales y sobre las condiciones laborales; en el marco del Ministerio de Trabajo, discutimos todo lo que tiene que ver con las políticas públicas orientadas al estímulo del trabajo en la Argentina. Pero también intervenimos en asuntos que parece que las organizaciones sindicales no tendrían por qué preocuparse”.

“Entendemos que hay formas de salario indirecto que
implican el bienestar de los trabajadores: las políticas
de tierra y vivienda, las políticas vinculadas a la formación
y el acceso a la salud de los trabajadores”.


Desde una perspectiva amplia, el trabajador es considerado en términos de su necesidad social, más allá de la pelea por el acceso al trabajo. “Entendemos que hay formas de salario indirecto que implican el bienestar de los trabajadores. Por ejemplo las políticas de tierra y vivienda, las políticas vinculadas a la formación, el acceso a la salud de los trabajadores…”, enfatiza el Secretario General de la CTA de Florencio Varela.

Otro tema sensible a la organización sindical es el trabajo no registrado.
En la charla Concetti historiza la participación de la Central en el Consejo del Salario Mínimo Vital y Móvil por un marco legal que regulara la problemática. “La ley salió, ya estamos trabajando en eso en los territorios donde tenemos mayor desarrollo.
Ahora bien, todos esos trabajadores no registrados carecen de representación a no ser que estén dentro de la CTA por ejemplo, o de alguna organización social… Pero además carecen de interlocutor, porque el Estado no los reconoce. No están registrados ni contenidos en ningún ámbito donde discutir una paritaria social. Este sector debe tener alguna forma de representación, de organización, y el Estado debe reconocerlo en una mesa donde forme parte del diálogo sobre políticas públicas”.

El modelo de
formación profesional

Para aportar en la calificación de los trabajadores afiliados o no a la organización gremial, la CTA cuenta con doce centros de formación profesional en la provincia de Buenos Aires. El que corresponde a Florencio Varela funciona desde hace cuatro años y otorga calificaciones a partir de un convenio con la Dirección de Escuelas de la Provincia.
En este caso, la CTA define la planificación de su oferta formativa en términos político pedagógicos y administrativos y la Dirección General de Escuelas garantiza la acreditación y respalda la calidad de la capacitación seleccionando a los docentes por concurso de oposición de antecedentes en acto público.
“Tratamos de orientar nuestra propuesta político pedagógica y de oficios en términos de lo que la realidad impone como necesidad a nuestros compañeros afiliados a la central”, apunta el Secretario General. “En ese sentido venimos trabajando históricamente una familia de cursos de oficios vinculados a la inmediata posibilidad, a través de la acreditación, no solo de mejorar el acceso al mercado laboral sino que además buscamos estimular la posibilidad de que esos compañeros inicien un proceso de cooperativismo y
autogestión”.

Precisamente, la perspectiva de la capacitación en oficios cobra otro espesor en el horizonte del trabajo autogestionado que persigue la central de trabajadores. “No somos ambiciosos en querer abordar toda la problemática laboral del Florencio Varela; pensamos en términos de la realidad laboral de nuestros propios compañeros, para que tengan la oportunidad de avanzar sobre otro piso. (…) Entendemos que el fortalecimiento de la organización es lo que hace posible que este tipo de propuestas puedan desarrollarse y generar respuestas en otros sectores que no necesariamente son parte integrante de la organización sindical.

Pensamos, claro, en la comunidad de la que somos parte y no excluimos obviamente cuando recibimos solicitudes de inscripción, por ejemplo, de estudiantes”.
Básicamente los cursos que ofrece este centro de formación profesional se concentran tres ramas: producción textil, electricidad y producción alimenticia. Además, el año pasado desarrollaron una iniciativa pionera relacionada con la producción apícola.
“Generamos en la regional Sur el primer curso de asistente apicultor y operario apícola, que continuaremos este año”. El curso se dicta en el paraje La Capilla, en zona rural de Varela, y fue pensado justamente por las particularidades que presenta la formación en condiciones laborales que generalmente no facilitan la capacitación de los trabajadores. Esta iniciativa también se enmarca en la política de estímulo a la creación de pequeñas empresas autogestionadas y, en este caso, proponiendo superar las desventajas que la apicultura presenta en las fases de extracción, envasado y comercialización de la producción a partir de la asociación cooperativa. “Hay una serie de normas y controles que tienen que ver con la higiene y la salubridad. Lo que pretendemos conla cooperativización de esos productores/trabajadores, es hacer menos dificultosos esos procesos”.
La idea de la autogestión requiere para Concetti la intervención del Estado como gran articulador de voluntades.
Si bien rescata el aporte de los programas sociales, señala que esos trabajadores deberían tener en algún momento la oportunidad de producir de manera autogestionada e ir independizándose de los programas o insertarse en empleos registrados en el marco de lo que llama relanzamiento de la etapa industrial. “No creemos en la política del subsidio permanente; entendemos que el Estado nos permite entrar en diálogo con otros sectores que si el Estado no mediara no habría posibilidad de sentarnos en la misma mesa y pensar en términos de proyección del desarrollo local. Nuestra propuesta se orienta a la cooperativización de los trabajadores-estudiantes, esto significa formarse no para que el saber se convierta en algo absolutamentepersonal, si no colectivizar ese aprendizaje en términos de proyecto productivo”.


Sobre el final de la charla, Ignacio Concetti repasó las cuestiones pendientes en el distrito, remarcando la necesidad de promover iniciativas articuladas por los diferentes actores —organismos del estado, organizaciones sindicales, organizaciones sociales— para atender a los trabajadores que se ocupan ocasionalmente. Al mismo tiempo, expresó que ámbitos como el del Consejo Provincial de Educación y Trabajo (COPRET), en la medida que sesionen, podrían materializar iniciativas posibles.
En relación a la posibilidad de trabajar junto al sector empresario, Concetti habló del diálogo abierto con la Confederación General Empresaria de la República Argentina. (CGERA) en el distrito, para plantearse proyectos conjuntos en 2015. “La palabra empresario no es una mala palabra. Nosotros tampoco queremos generar microemprendimientos para pobres, nosotros queremos que los trabajadores se jerarquicen, no solo en términos de su formación sino también en términos de su ingreso. Los argentinos tenemos que poder vivir todos”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario